El teniente de alcalde y presidente de Emaya, Llorenç Bauzá de Keizer, ha asistido a la presentación de la campaña informativa organizada por Ecovidrio con la colaboración del Ajuntament de Palma

Palma, 17 de diciembre de 2024. El teniente de alcalde y presidente de la empresa municipal Emaya, Llorenç Bauzá de Keizer, ha asistido este martes a la presentación de un árbol de Navidad formado por pequeñas reproducciones de iglús destinados a la recogida de envases de vidrio para su posterior reutilización.

La campaña, organizada por la entidad especializada en la recogida selectiva Ecovidrio, con la colaboración del Ajuntament de Palma, se halla en marcha a lo largo de todo el día de hoy en la confluencia entre la Plaça de les Columnes y Nuredduna, y, además del árbol, de cuatro metros de altura e integrado por un centenar de iglús, acoge un estand donde los educadores ambientales informan a los ciudadanos sobre las fórmulas existentes para efectuar una correcta separación del vidrio.

Durante la jornada, que ha contado también con la presencia del coordinador de Ecovidrio en las Illes Balears, Ivan Tolsà, está previsto sortear 120 iglúes entre los visitantes del estand, que pueden optar al premio mediante la participación en un juego virtual.

La iniciativa coincide con una época, la de las fiestas de Navidad, en que, según los datos constatados por Ecovidrio, se genera hasta el 20 por ciento de los residuos de envases de vidrio que se producen en el transcurso del año.

En el caso de Palma, los informes de la entidad correspondientes a 2023 recogen que en el municipio se reciclaron 10.791 kilos de este tipo de recipientes, lo que implica una media de 25,5 kilos por residente, equivalente a unos 87 envases.

En función de los mismos datos recopilados por Ecovidrio, Palma presenta una media de un contenedor de vidrio por cada 327 habitantes: En la capital de las Illes Balears hay instalados actualmente 1.291 dispositivos para la recogida de vidrio.

Una de las particularidades del vidrio que se deposita en los contenedores específicamente destinados a este material es que permite el reciclaje al 100 por ciento, circunstancia que hace posible su reutilización completa para la fabricación de nuevos envases, de forma indefinida y sin que se produzcan pérdidas en las propiedades originales.